El responsable católico de ecumenismo preferiría un encuentro en que las confesiones reformadas pidieran disculpas por sus errores.
21 DE JUNIO DE 2012, ROMA
Se acerca 2017, y las confesiones surgidas de la Reforma protestante ya están preparando la celebración de los cinco siglos de su inicio, conmemorando el momento en que Lutero clavó sus 95 tesis en la puerta de la iglesia del castillo de Wittenberg.
Es indudable para seguidores y detractores que los primeros días de noviembre del año 1517 marcaron la historia de la fe cristiana y la sociedad a nivel mundial.
Se ha producido una respuesta pública que es muy significativa ante la invitación de cortesía que se ha extendido a la Iglesia católico-romana (ICR) como invitada a algunos de los actos en Alemania.
Y curiosamente esta respuesta proviene del Presidente del Consejo Pontificio para la Unidad de los Cristianos, el Cardenal Koch . Ha sido absolutamente claro al respecto en unas declaraciones colgadas en la web de la diócesis de Münster: « no podemos celebrar un pecado (…) Los acontecimientos que dividen a la Iglesia no puede ser llamados un día de fiesta».
El cardenal matiza luego que la conmemoración es una fecha que hay que recordar, pero en ningún caso celebrar.
En una curiosa paradoja el responsable de la Unidad de los Cristianos de la ICR reconoce que será tachado de «anti-ecuménico», y que le gustaría asistir en lugar de a una celebración de la memoria de la Reforma protestante a una reunión en la que las confesiones reformadas pidieran disculpas y reconociesen sus errores .
Es indudable para seguidores y detractores que los primeros días de noviembre del año 1517 marcaron la historia de la fe cristiana y la sociedad a nivel mundial.
Se ha producido una respuesta pública que es muy significativa ante la invitación de cortesía que se ha extendido a la Iglesia católico-romana (ICR) como invitada a algunos de los actos en Alemania.
Y curiosamente esta respuesta proviene del Presidente del Consejo Pontificio para la Unidad de los Cristianos, el Cardenal Koch . Ha sido absolutamente claro al respecto en unas declaraciones colgadas en la web de la diócesis de Münster: « no podemos celebrar un pecado (…) Los acontecimientos que dividen a la Iglesia no puede ser llamados un día de fiesta».
El cardenal matiza luego que la conmemoración es una fecha que hay que recordar, pero en ningún caso celebrar.
En una curiosa paradoja el responsable de la Unidad de los Cristianos de la ICR reconoce que será tachado de «anti-ecuménico», y que le gustaría asistir en lugar de a una celebración de la memoria de la Reforma protestante a una reunión en la que las confesiones reformadas pidieran disculpas y reconociesen sus errores .
Fuentes: ReL
© Protestante Digital 2012
Desde la Iglesia de la Trinidad de Cádiz no entendemos cómo el responsable de ecumenismo de la ICR (Iglesia Católica Romana) puede hacer estas declaraciones que contradicen las funciones que debería ejercer este jerarca católico-romano. Si su misión es la de buscar la unidad no se entiende que sea su principal obstáculo para conseguirlo. Vamos a reproducir uno de los comentarios que ha suscitado esta noticia y que se ha publicado también en Protestante Digital:
Es paradójico, que una persona este en una misión y esta, opine en contra de ella; seguramente es como el entrenador de un equipo de futbol, que no cree en su equipo, pero lo dirige por intereses propios. De la abundancia del corazón habla la boca; luego hay algunos de nosotros que sigue abrigando la remota idea de que la I.C y nosotros algún día nos pudiéramos unir. Para nosotros es una fiesta para ellos un pecado o una derrota; por eso; repito, son miles los católicos que se pasan a las filas de nuestra iglesia. Solo Dios satisface
Adelkader Garcia
22/06/2012 03:33h
Si desa ponerse en contacto con nuestra Iglesia: josema_fi_27@hotmail.com
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